De ahí me iba a la panadería, que quedaba cerca de casa, y compraba siempre lo mismo: medio kilo de miñones. Empujaba la puerta vaivén, sacaba un número en puntas de pie, y esperaba mi turno.
El panadero me hablaba solo dos veces; una para preguntarme que quería, y la otra para saber si había traído la bolsa del pan.
En esa época, todas las madres del mundo tenían una bolsa para el pan que solían colgar atrás de la puerta de la cocina. Todas, menos la mía. Ella fue siempre así .... moderna para eso.
- Javi, decile al panadero que sea bueno y que te de una bolsita de plástico de esas que tiene el.
Para el panadero darte una bolsa de nylon era, mas o menos, como prestarte el auto; y además de calentarse bastante, te cobraba la bolsa casi tan cara como el pan.
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Hoy, gracias a Dios, no suelo hacer las compras con la misma frecuencia que cuando era chico; pero, de vez en cuando, voy al supermercado y compro alguna que otra cosa que me encargan. ¿Ustedes nunca van?
El otro día llegue a la caja con el chango bastante cargado; y mientras descargaba lo que había comprado sobre la cinta transportadora, la cajera me pregunto: ¿Señor .... trajo bolsas?
Me debe haber visto cara de sorpresa, porque me aclaró rápido - Es que ahora la gente trae unas 20 bolsas, que les vendemos aquí, para que la compra sea mas ecológica.
- Ah mire Usted ...
En definitiva, además de tener que comprar todo orgánico para evitar los conservantes y la mar en coche porque sino la comida tiene bacterias; chequear que los cereales no tengan “jarabe hidrogenado de maíz” porque te crea una adicción incurable que te morís; y gastar una fortuna por semana en pañales biodegradables para cuidar el medio ambiente, tengo que traer 20 bolsas de tela porque a la cadena de supermercados le pinto la onda ecológica !
De algún modo, todas esas madres eran ecologistas (todas menos la mía). Compraban huevos organicos que eran envueltos en papel reciclado, usaban envasese de vidrio dos veces, comian fiambrin (*), y siempre usaban la misma bolsa para comprar el pan.
Creo firmemente en el cuidado de los recursos naturales y no me hago el "moderno" cuando pienso en un planeta para mis nietos.
Si me dan esas bolsas de papel sin manija que les salen un poco mas que las de nylon, que ellos mismos impusieron por un tema neto y exclusivo de costos, yo las reciclo a pesar de ser incomodas y bastante difíciles de llevar; pero no me hagan el cuento que para ahorrarse el costo de reemplazar todos sus envases se volvieron ecologistas, simplemente llamando a la conciencia recicladora de sus clientes.
(*) Nota del autor: Fiambrín: (s) fiambre hecho a base de queso sardo y pedacitos de jamón